La limonada hecha en casa no puede faltar nunca en los meses de más calor. Su consumo es recomendable sobre todo en los meses de verano. En el mercado encuentras limonadas, pero suelen tener aditivos y conservantes. Es mucho mejor hacerla nosotros mismos, ya que su preparación es muy sencilla. En CurioSfera-Recetas.com, te explicamos cómo hacer limonada casera paso a paso.
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Ingredientes para Limonada casera
Para poder hacer una limonada casera natural vas a necesitar:
- 2 litros de agua fría.
- 2 limones grandes.
- Azúcar a tu gusto.
- Cubitos de hielo.
Se recomienda utilizar una licuadora, aunque no es algo imprescindible para preparar esta refrescante bebida. El tiempo de preparación estimado para esta receta es de 10 minutos.
Preparación Limonada casera natural
- Lo primero que debes hacer para preparar una limonada casera natural es cortar los limones en 4 partes con un cuchillo (cuidados con los dedos). No lo debes cortar en rodajas, sino en 4 gajos. Esto es, realizar 4 cortes de arriba hacia abajo. Si no dispones de licuadora en tu casa, debes exprimir los limones. Para poder aprovechar al máximo su jugo, te recomendamos meterlos 5-10 segundos en el microondas o un par de minutos en agua tibia. El calor hará más fácil que puedas extraer el máximo zumo de cada limón.
- Seguidamente, debes colocar en la licuadora los 8 trozos de limón que has obtenido. Añade 1 litro de agua fría y añade azúcar a tu gusto. Recuerda ser prudente con el azúcar que añades a la limonada y no pasarte de dulce. Siempre vas a estar a tiempo de añadir más azúcar posteriormente si lo deseas.
- Licuar todos los ingredientes hasta el punto de obtener una mezcla homogénea de color blanquecino y con espuma. Tardarás solamente unos dos minutos. Te recomendamos que la velocidad del electrodoméstico sea entre media y alta.
- A continuación, debes pasar por un colador el líquido obtenido para eliminar posibles restos de pulpa o semillas. Seguidamente, añade el resto de agua fría que tenías preparado y mézclalo todo. Te aconsejamos que utilices agua embotellada, ya que el agua del grifo lleva cloro y puede añadir un sabor no deseado a nuestra limonada casera.
- Ahora lo que toca es probar el refresco y ver que tal dulce ha quedado. Si lo crees oportuno, puedes añadir un poco más de azúcar. Recuerda que debes remover bien con una cuchara grande para que se deshaga completamente. Como consejo, si quieres que la limonada tenga menos calorías, puedes emplear azúcar moreno en lugar de azúcar blanca. También existe la posibilidad de utilizar stevia. Pero cambia un poco el saber y puede que el resultado no te agrade.
- A la hora de servir la limonada, hazlo en un vaso bien grande y con muchos cubitos de hielo. Si quieres puedes dejar volar tu creatividad y decorar el borde con una rodaja de limón, una hojita de menta o incluso poner azúcar como si fuera un cóctel sofisticado.
Y esto es todo, hasta aquí este método para hacer una limonada.
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